Ocurre en ocasiones que, cuando caminas aparentemente sin rumbo, aparentemente sin destino, el camino decide concederte un regalo.
Fue un día así, un día aparentemente normal, cuando te encontré. No destacabas entre el resto, nadie parecía fijarse en ti, nadie parecía ver todo lo que ocultabas.
Te invite a entrar en mi vida, vi todo lo que podías ofrecer y a sido mas de lo que yo esperaba.
Este es el resultado final, el cuadro que surgió desde el día en que te encontré. Un alma gemela, un reflejo de mi misma que, aparentemente, no se parece tanto a mi.
Alguien abandono esta tabla aquel día en la calle, alguien parecía decirme "Tu la necesitas mas que yo". Y tenia razón. He aquí el resultado. Gracias por este regalo.
Acrílico sobre tabla. Junio de 2012.
Sabia que no hacia mal en seguirte .
ResponderEliminarNuevamente impresionado.
Me han gustado mucho las fotos de tu pintura y mas los comentario a modo de relato.
ResponderEliminarAitatxo.
P.D. ya tengo ganas de verte...